Algunos de los beneficios que nos aportan las cebollas son:
Cardiosaludable. Debido a sus componentes azufrados previene la formación de trombos, así como el colesterol y los triglicéridos altos.
Diurética. Por su riqueza en potasio y escaso sodio, resulta diurética y ayuda en casos de edemas, hipertensión y piernas pesadas.
Digestiva. Previene la fermentación intestinal, la presencia de parásitos y hongos, y el estreñimiento. Alivia las digestiones pesadas y la flatulencia con hipoclorhidria, pero hay que ser cauto si se suele sufrir acidez.
Antioxidante. Contiene quercitina, un flavonoide de propiedades antiinflamatorias, antialérgicas y protectoras frente al cáncer.
Antidiabética. Gracias a su riqueza en cromo, que forma parte del llamado FTG (factor de tolerancia a la glucosa), y también a la glucoquinina, que estimula el páncreas, ayuda a reducir el nivel de azúcar en la sangre en las personas diabéticas.
Antiséptica. Las propiedades antisépticas y mucolíticas de los componentes azufrados, junto con la acción antiinflamatoria de la quercitina, la hacen eficaz frente a problemas respiratorios como resfriados, bronquitis y asma. Es un conocido remedio popular frente a la tos dejar una cebolla cortada por la mitad en la mesilla de noche.