Reunir y mantener un eficaz equipo de colaboradores es una de las tareas de la gestión empresarial más complicadas y, a la vez, útiles. Por mucho que adquiramos tecnologías, tengamos ideas brillantes o clientes interesados en nuestro producto, si no somos capaces de atraer y mantener el talento, nuestro negocio está condenado al fracaso.